Agroseguros: protección clave para el campo chileno frente al cambio climático y los desastres naturales
- Seguro Visión

- hace 13 minutos
- 2 Min. de lectura
En un país como Chile, donde la agricultura cumple un papel estratégico en la economía y la seguridad alimentaria, los riesgos climáticos y naturales —como heladas, sequías, lluvias intensas o incendios— pueden poner en jaque el trabajo de miles de productores. En este contexto, Agroseguros se ha convertido en un actor esencial para la protección y sostenibilidad del sector agrícola.
¿Qué es Agroseguros?
Agroseguros es una institución pública dependiente del Ministerio de Agricultura (MINAGRI), creada con el propósito de fomentar y facilitar el acceso al seguro agrícola, ganadero y forestal para los productores del país. Su misión principal es promover la contratación de seguros que protejan la producción y los bienes asociados a la actividad agropecuaria, especialmente entre los pequeños y medianos agricultores que enfrentan mayores vulnerabilidades ante fenómenos naturales.
El papel de Agroseguros en el sistema asegurador rural
Agroseguros actúa como un ente articulador entre el Estado, las aseguradoras y los agricultores, diseñando programas de seguros con subsidio estatal al costo de la prima. Esto permite que los productores —muchas veces sin acceso a seguros tradicionales por sus altos costos— puedan asegurar sus cultivos, animales o plantaciones forestales a precios accesibles, y así proteger su inversión y estabilidad económica.
Además, la entidad trabaja con las principales compañías aseguradoras del país que ofrecen productos agrícolas, como HDI Seguros, Mapfre o SURA, entre otras, y coordina sus acciones con instituciones como el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) y el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
Su aporte al desarrollo agrícola nacional
El rol de Agroseguros va mucho más allá del subsidio:
Promueve la cultura del aseguramiento rural, impulsando la educación financiera y el conocimiento sobre gestión de riesgos entre los productores.
Fomenta la estabilidad económica del sector agrícola, permitiendo que los agricultores mantengan su actividad incluso tras eventos catastróficos.
Contribuye a la resiliencia climática, ayudando al país a adaptarse a las consecuencias del cambio climático en la producción de alimentos.
Apoya la continuidad productiva, al garantizar que los agricultores puedan volver a sembrar o producir luego de un siniestro.
Principales beneficios para los agricultores
Subsidio estatal al costo del seguro: el Estado cubre entre el 30% y 70% de la prima, según el tipo de productor y cultivo.
Protección frente a eventos climáticos extremos: heladas, sequías, lluvias torrenciales, vientos o incendios.
Cobertura amplia: disponible para cultivos anuales, frutales, hortalizas, animales, apicultura y forestación, entre otros rubros.
Acceso simplificado: los agricultores pueden contratar su seguro a través de corredores, bancos, INDAP o aseguradoras participantes.
Fomento al desarrollo sostenible: al mitigar el riesgo, los seguros permiten a los productores acceder más fácilmente a créditos y financiamiento agrícola.
Un instrumento clave para enfrentar el futuro
El cambio climático ha hecho más impredecible la actividad agrícola, y con ello, más necesario el acceso a herramientas de protección. En este escenario, Agroseguros se consolida como una política pública fundamental para resguardar el trabajo, el patrimonio y la seguridad alimentaria del país.
Su existencia demuestra que la colaboración entre el Estado, el mercado asegurador y los agricultores puede generar soluciones sostenibles y de alto impacto social, fortaleciendo el desarrollo rural y contribuyendo a un Chile más resiliente frente a los desafíos del clima.
Comentarios